lunes, 19 de marzo de 2018

María, mediadora de todas las Gracias (V).-19-MARZO-2018

ANDREA VACCARO.-BARROCO
      Finalizada la anterior entrada dejaba planteado un interrogante: ¿Dónde voy a parar con este comentario? Es muy sencillo. Voy a desmenuzar un poquito unos pequeños detalles de las bodas en Caná.
      Si en una cosa mínima como esa Jesús, a petición de María, actuó, ¿cómo no va a escuchar los ruegos, peticiones o problemas de cualquiera de nosotros  que Ella le presente intercediendo por la persona o personas que se lo han pedido?
JESÚS MEDIADOR
      Es cierto, absolutamente cierto, que el único mediador ante Dios es Jesucristo. Es la causa primera, básica, esencial, de la mediación. Pero María, siendo Madre de Jesucristo y de todo el género humano por el encargo de su Hijo desde la Cruz dado a Ella y a San Juan, ('Mujer, ahí tienes a tu hijo. Luego dice al discípulo: Ahí tienes a tu Madre. Y desde aquella hora el discípulo la acogió en su casa'. Jn. 19, 25-27), atiende todos los ruegos o peticiones de mediación que se le hacen y los presenta a su Hijo, el cual, profundo conocedor de la persona que hace el ruego, sabrá si le conviene lo que pide en ese momento, lo pospone para más adelante o sencillamente no se lo concede por ser algo que le puede perjudicar.
MARÍA AL PIE DE LA CRUZ
       El don de la mediación Jesús lo comparte con la mujer que aceptando el Plan de Dios hizo posible su venida al mundo como hombre para redimirnos ('He aquí la sierva del Señor. Hágase en mí según tu palabra'. Lc.1, 38). Y teniendo en cuanta que Dios es AMOR, pienso que en su Reino abundará en grado infinito. Puede que a esto se refería San Pablo cuando dice: 'El amor no pasa jamás [...] Ahora subsisten estas tres cosas: la fe, la esperanza, el amor, pero la más excelente de todas es el amor'. ICor. 13, 8-13). No he puesto toda la cita, pero sí pongo su localización por si la quieren leer.

     Incluso nosotros es muy posible que hayamos actuado como mediadores para solucionar algún problema ajeno a petición de algún amigo o familiar, si bien en un plano humano.
      Los primeros Padres de la Iglesia fueron descubriendo, defendiendo y enseñando la importancia de la mediación mariana por nosotros. Nuevamente pongo unos fragmentos de homilías de San Germán:
      '¿Quién combate tanto como tú a favor de los pecadores? ¿Quién como tú defiende con sus alegaciones a los que no obran rectamente? [...] Tú que gozas de una autoridad maternal en relación a Dios, obtienes la gracia de un generoso perdón, incluso para quienes han pecado muy gravemente'. (Homilía de la Dormición).
DORMICIÓN DE LA VIRGEN.-Escultura en la abadía de San Pedro (Solesmes, Francia).-GÓTICO
      'Oh toda pura y digna de gran veneración y alabanza, ofrenda consagrada a Dios y superior a todo lo creado. [...] Mediante tus preces maternales y siempre bien acogidas y persuasivas, dirigidas a tu Hijo que de ti ha nacido sin concurso de varón y que es Dios y creador de todas las cosas, cuida de regir el timón de la Iglesia y condúcela hacia puerto seguro, que se halla preservado de las agitaciones en herejías y escándalos. Reviste a los sacerdotes con el esplendor de la justicia y del gozo de una fe probada, incontaminada y esclarecida. (Homilía I sobre la Entrada de la Madre de Dios).
MARÍA MEDIADORA DE TODAS LAS GRACIAS
      Tiene muy claro los conceptos de mediación que expone, aunque no he puesto las citas completas para no hacerlo largo.
       Ahora ya finalizo esta entrada y en la próxima acabaré con este tema.

jueves, 1 de marzo de 2018

María, mediadora de todas las gracias (IV)

MAESTA.-DUCCIO DI BUONINSEGNA.-GÓTICO
      En la entrada del 17 de diciembre de 2017 decía que 'seguiré tratando el tema de los Padres de la Iglesia respecto a la Virgen'. Y ese día ya ha llegado. Es cierto que he tardado mucho, pero es que yo mismo estoy asombrado de la cantidad de citas encontradas tanto en mi biblioteca como en internet, de las cuales he tenido que hacer una necesaria selección para no hacer excesivamente larga esta entrada, que forzosamente debo desdoblar en alguna más.
     
DESCENDIMIENTO.-FRA ANGÉLICO.-RENACIMIENTO
      A la vista de estas citas o comentarios he visto reforzada mi fe en María. Su trayectoria desde la Anunciación hasta que murió en el mundo para irse con su Hijo, con el Padre y con el Espíritu, pasando por la amargura de la Pasión y Muerte de su Jesús y del inmenso gozo de verlo resucitado, ha hecho mella en muchísima gente de todos los siglos (incluyéndome a mí mismo), pero los Padres de la Iglesia han querido mostrarnos los sentimientos que han aflorado en su existencia a través de sus estudios, de sus meditaciones, de su vida orante,...
      Es difícil hacer una selección de estos textos marianos. Pienso que su envergadura siempre va a dejar insuficiente cuanto pueda escribir. Lo único que me ha animado es la decisión de abandonarme en el Espíritu de Dios y en la mismísima Madre común de todos nosotros.
     
      Una cita, muy breve por cierto, nos puede dejar llenos, pensativos o trasladarnos al mismo corazón de la Virgen. ¿Qué podemos decir de lo que escribió San Germán, Patriarca de Constantinopla, que vivió entre los siglos VII y VIII? Fíjense: 'Quién como tú, a semejanza de tu Unigénito, cuida del género humano? ¿Quién así nos defiende en nuestras miserias...?' Es breve, pero si nos paramos a analizar el contenido de estos dos interrogantes, puede tener un fruto personal más o menos abundante y de mucha riqueza interior.
      No perdamos detalle de lo que dice en otra ocasión: 'Poderoso es tu auxilio para alcanzar la salvación, oh Madre de Dios;  tan grande que no hay necesidad de otro intercesor cerca del Señor. Aquí acude ahora tu pueblo, tu herencia, tu grey, que se honra con el nombre de cristiano, porque conocemos y tenemos experiencia de que recurriendo insistentemente a ti en los peligros, recibimos abundante respuesta a nuestras peticiones. Tu munificencia, en efecto, no tiene límites; tu socorro es inagotable; no tienen número tus dones'.
     
      En uno de sus sermones, San Bernardo anima así a su auditorio: 'Busquemos la Gracia y busquémosla por María, porque ella encuentra lo que busca y jamás queda frustrada; el Hijo buscará a la Madre y ella misma será escuchada por su reverencia'. Está mostrando la mediación de la Madre ante el Hijo como un hecho cierto y veraz lleno de confianza hacia ella.
         San Juan María Vianney, el santo cura de Ars, no es un Padre de la Iglesia pero también nos legó su certera opinión en esta frase: 'Siempre que tengamos que pedir una gracia a Dios, dirijámonos a la Virgen Santa, y con seguridad seremos escuchados'. (Sermón sobre la pureza) .
      San Juan Damasceno, obispo y doctor de la Iglesia, tenía una gran facilidad para escribir para la gente sencilla de forma asequible y hacerles ver las cosas más profundas mediante un lenguaje natural y ameno. En una homilía sobre la dormición de la Virgen dijo: 'Nuestra Señora es descanso para los que trabajan, consuelo de los que lloran, medicina para los enfermos, puerto para los que maltrata la tempestad, perdón para los pecadores, dulce alivio para los tristes, socorro de los que rezan'. Y en otra ocasión volvió su oración a la Virgen pidiéndole: '¡Oh tú, María, cuya intercesión no es rechazada ni la oración desoída, pues estás inmediatamente próxima a la Divinidad y más cerca que nadie de la Trinidad Santa'. 
       
SAN ANSELMO DE CANTERBURY
Pienso que muchas personas se verían reflejadas en esas asequibles y a la vez profundas palabras y mensajes. Incluso en nuestros días son enormemente útiles para cualquier persona que se pare, piense, reflexiones y las medite un poco. Quizá sin darse cuenta encontrará el tierno sabor del mensaje que la Madre le puede dar.
      San Anselmo de Canterbury, que vivió en el siglo XII, gran teólogo y reformador de la vida monástica, que profundizó en la Metafísica y le permitió acercarse a los misterios cristianos, tenía unas ideas muy claras con respecto a la intercesión de la Virgen: 'Ruega por mí, Santa Madre de Dios, para que, pues me causa tanto pavor el tribunal de tu Hijo, conociendo la multitud de mis pecados, pueda por tu venerada intercesión quedar limpio de todas mis culpas, con el riego de la compunción del alma y el rocío de una confesión piísima'.
      En tiempos recientes tenemos la autorizada voz del Papa San Pío X: 'Por razón de esta sociedad de dolores y de angustias ya mencionada, entre la Madre y el Hijo, se ha concedido a la augusta Virgen que sea poderosísima mediadora y conciliadora de todo el orbe ante su Unigénito Hijo'. (Encíclica 'Ad diem illum'.-Febrero de 1914).

       Otro Papa muy conocido a pesar del tiempo transcurrido, es León XIII. Nos dejó escrito: 'Después de haber sido cooperadora en la obra maravillosa de la redención humana, vino a ser para siempre la dispensadora de todas las gracias, frutos de esa misma redención, habiéndosele otorgado para ello un poder cuyos límites no pueden columbrarse. Se la ha llamado entre muchos nombres, nuestra Señora, nuestra Mediadora, la Reparadora del mundo, la dispensadora de las gracias de Dios'. (Encíclica 'Adiutricem populi', septiembre 1895).
     
S.S. LEÓN XIII
      Esto es una constante. En la segunda entrada de este tema, la del 17 de diciembre pasado, comenté muy de pasada la intercesión o mediación de la Virgen en Caná  por los novios que se quedaron sin vino en la celebración de su matrimonio. 
      Ciertamente es una circunstancia sin importancia, pero para el joven matrimonio no lo hubiera sido tanto. Y para sus familias respectivas, tampoco. Sin embargo María no permaneció ajena y sabía que su Hijo podía solucionar el problema. 
      Circunstancias aparte por estar ya comentadas, lo cierto es que Jesús ESCUCHÓ a su Madre y ATENDIÓ su petición. ¿Dónde voy a parar con este comentario?
      Lo veremos en la próxima entrada.
      Que Nuestra Señora la Virgen del Pilar y su Divino Hijo nos bendiga y asistan.
NUESTRA SEÑORA DEL PILAR.-ZARAGOZA (ESPAÑA)