martes, 27 de enero de 2015

¿Sacramentales = Sacramentos? (I)

DOMINGO DE RAMOS. BENDICIÓN DE LAS PALMAS
      Pues no. No son lo mismo aunque haya personas que así lo puedan creer pensando que es otra forma de nombrar los Sacramentos.
      Me he decidido a escribir algo sobre este tema a raíz de una conversación con algunos conocidos nuestros a la salida de la Eucaristía del domingo. Surgió el tema y escuchamos las opiniones más peregrinas. Intervinimos mi esposa y yo aclarando conceptos y exponiendo las clases y formas de sacramentales que la Iglesia ha puesto para nuestro bien y ayuda.
      Esto me animó a escribir algo sobre este tema concreto, pero sin ánimo de ser exhaustivo, entre otras cosas porque yo soy el primero que no conozco todo cuanto se pueda referir a este tema.
      ¿Qué dice la Iglesia sobre ellos? El Concilio Vaticano II, en la Constitución 'Sacrosanctum Concilium' sobre la Sagrada Liturgia, expone en el número 60 haciendo referencia a los sacramentales: 'La Santa Madre Iglesia instituyó, además, los sacramentales. Estos son signos sagrados creados según el modelo de los Sacramentos, por medios de los cuales se expresan efectos, sobre todo de carácter espiritual, obtenidos por la intercesión de la Iglesia. Por ellos, los hombres se disponen a recibir el efecto principal de los Sacramentos y se santifican las diversas circunstancias de la vida'.

      Hay varias diferencias fundamentales: Los Sacramentos , como ya escribí en algunas entradas anteriores (en noviembre de 2008), son signos sensibles instituidos por Jesucristo para darnos la Gracia. Los sacramentales son signos sagrados instituidos por la Iglesia como dice el Vaticano II, por medio de los cuales se reciben efectos espirituales.
       Es decir: Los Sacramentos los ha instituido Jesucristo; los sacramentales, la Iglesia. Los Sacramentos dan la Gracia; los sacramentales ayudan a los cristianos a conseguirla por distintos medios. Los Sacramentos actúan por sí mismos; los sacramentales actúan por la oración de la Iglesia. Y muy importante: los Sacramentos son necesarios para nuestra salvación; pero los sacramentales, no. 

      En concreto, el Catecismo de la Iglesia Católica dice en su punto 1670: 'Los sacramentales no confieren la Gracia del Espíritu Santo a la manera de los Sacramentos, pero por la oración de la Iglesia preparan a recibirla y disponen a cooperar con ella'.
      Tal vez lo que más impactó en las personas con quienes hablábamos fue cuando les pusimos ejemplos de sacramentales: la señal de la Cruz, las palmas bendecidas del Domingo de Ramos, el Escapulario de la Virgen del Carmen, la ceniza bendecida el Miércoles de Ceniza, las bendiciones,...¿Saben por qué? Precisamente porque todos los conocían pero sin saber el papel que pueden desempeñar en la Iglesia y en la vida religiosa habitual de todos nosotros, en el aspecto que hoy tratamos.
     
      Como decía anteriormente, sin ánimo de extenderme demasiado, voy a desarrollar alguno de ellos, apoyándome, como suelo hacer, en la Doctrina de la Iglesia y en las Sagradas Escrituras, como he dicho más arriba.

      Lo que me parece fundamental a la hora de recibir un sacramental es la disposición que tenemos para recibirlo y aceptarlo. En qué disposición interior se pone nuestra alma, nuestro corazón, para acogerlos, ya que, no lo olvidemos, son signos sagrados.
      Uno de los sacramentales más conocidos tal vez sean las bendiciones. Al finalizar la Santa Misa el sacerdote celebrante procede a bendecir a los que han participado con él en el Sacrificio Eucarístico, y se dan bendiciones solemnes cuando se conmemora alguna festividad especial.
MELQUISEDEC BENDICE A ABRAHAM
     Las bendiciones han existido siempre, aunque no fueran sacramentales puesto que la Iglesia no existía. En la Biblia podemos ver algunos pasajes,por ejemplo, la bendición de Melquisedec a Abraham: 'Melquisedec, rey de Salem, sacerdote del Dios Altísimo, le ofreció pan y vino y lo bendijo diciendo: -Que el Dios Altísimo que hizo el cielo y la tierra bendiga a Abran. Bendito sea el Dios Altísimo que te ha dado la victoria sobre tus enemigos-. Y Abran le dio el diezmo de todo'. (Gen. 14, 18-20). También está la bendición de Isaac a Jacob (Gen. 27, 1-19). O la de Jacob a los hijos de José, Manasés y Efraím, y a sus doce sus hijos. (Gén. capítulos 48 y 49).
BENDICIÓN DE LA MESA
      Fijémonos en lo que dice el Catecismo de la Iglesia Católica en su punto 1669: 'Los sacramentales proceden del sacerdocio bautismal: todo bautizado es llamado a ser una 'bendición' (Cf. Gén. 12, 2) y a bendedcir (Cf. Lc. 6, 28; Rom. 12, 14; 1P,3, 9). Por eso los laicos pueden presidir ciertas bendiciones (Cf. SC, 79; CIC can. 1168). La presidencia de una bendición se reserva al ministerio ordenado (obispos, presbíteros y diáconos; cf. Ben. 16, 18), en la medida que dicha bendición afecte más a la vida eclesial y sacramental'.
      En nuestros días también hay padres que bendicen a sus hijos, aunque no sean tan solemnes sus bendiciones, pero hay bendiciones que son cotidianas en nuestra vida, por ejemplo, cuando nos sentamos a comer y bendecimos la mesa, es decir, los alimentos que tomamos y a quienes se sientan alrededor de la mesa y dando gracias a Dios por los dones recibidos.
BENDICIÓN DE UNA VIVIENDA
      Así podríamos citar también las bendiciones que pedimos para la casa donde moramos, para el automóvil que tenemos o a un nivel más sencillo cuando pedimos que nos bendigan la medalla de una advocación de la Virgen o de algún santo de nuestra devoción como también para el Rosario que solemos emplear cuando lo rezamos. A nivel eclesial sabemos que se bendicen los templos, el altar del mismo o las campanas, así como los distintos objetos del culto litúrgico, por ejemplo. La próxima entrada finalizaremos este tema.
BENDICIÓN DE UN ALTAR
      Que Jesús, Salvador y Redentor nuestro y su Santísima Madre la Virgen de Jerusalén, nos acompañen y bendigan. 
VIRGEN MARÍA DE JERUSALÉN

sábado, 10 de enero de 2015

A vosotros, jóvenes...y a los no tan jóvenes

ADORACIÓN DE LOS MAGOS.- EDWAR BURNE-JONES.- PRERRAFAELISMO
      Hay ocasiones en las que rebuscando papeles o documentos de algún tipo, más o menos archivados, se encuentra uno con algo que ya no recordaba que existía. ¿Por qué lo guardé? No lo sé, (¡tantas cosas se guardan!) pero les aseguro que tiene tanta actualidad hoy como entonces y tampoco tiene desperdicio alguno. Aunque los destinatarios son los jóvenes, pienso que a todos nos puede venir bien.
      Apenas hace unos días que hemos celebrado el Nacimiento de Jesús y su Epifanía y este escrito deseo que sea también un pequeño homenaje a ese Niño, luego adulto, cuyo bautismo celebramos el 11 de enero. También es un homenaje a los jóvenes de todo el mundo y de todos los tiempos y eso me anima a publicarlo hoy, en esta entrada, unos años después de escribirlo. También lo es a todos cuantos lo lean. Veamos.
BAUTISMO DE CRISTO.- SEBASTIANO RICCI.-BARROCO

     
'Os felicito a vosotros, jóvenes, porque habéis vencido al maligno'. (I Jn, 2, 13). Esto lo dijo San Juan. Pero yo os digo: vencer al maligno no es fácil. Depende de nosotros en un 2%. El 98% restante depende de esa persona tan denostada hoy, tan combatida hoy por algunos sectores sociales o políticos, tan vivificante hoy, tan plenificante hoy, porque es capaz de seguir atrayendo hoy a montones de jóvenes y de adultos en pos de Él, como antaño lo hicieron Pedro, su hermano Andrés y otros muchos.                                                                                   SAN JUAN ESCRIBE EL APOCALIPSIS.-MARTIN DE VOS.- MANIERISMO.                                                                         Él es total en todo. Y yo, otro Juan del siglo XXI, os digo también, cuando las experiencia de vida fructifican y las hebras de plata se peinan a diario, que jamás me ha defraudado ni me ha abandonado en ninguna de las facetas de mi vida: profesión, familia, sociedad... Es cierto, como dicen y creen algunas personas, que vosotros, jóvenes del siglo XXI, lo tenéis aparentemente fácil: botellones, sexo, protestas, indignaciones, pocas ganas de trabajar o de estudiar o de hacer algún sacrificio por pequeño que sea y alguna cosa más, pero no vale la pena hacerlo, porque eso será cierto en algunos casos (o quizá muchos), pero no es lo que ocurre con todos vosotros.
     
Ciertamente esas 'actividades' citadas antes son fofas, inconsistentes por sí mismas, huecas, vacías de sentido,...               PANORÁMICA DE UN 'BOTELLÓN'.           Posiblemente cuando después de uno de esos 'festivales' que os he nombrado anteriormente hayan pasado y regreséis a casa vacíos sin más horizonte que buscar una nueva cita para más de lo mismo, es cuando tal vez tú, muchacho, o tú, muchacha, hagáis un viaje a vuestra intimidad, donde nadie ni nada puede engañaros (a no ser que vosotros mismos queráis engañaros), y veáis la imperiosa necesidad de emprender una huida a un lugar donde podáis encontrar la paz que no tenéis y la plenitud personal que ansiáis sin saber cómo hacerlo. 
      Pero yo os digo que sí. Que es posible. Que pueden alcanzarse esos objetivos. Porque creo en la juventud de hoy, en sus valores, y porque desde mi propia experiencia sé que el lugar existe y siempre tiene las puertas abiertas a cuantos desean entrar. Un lugar que es capaz de reunir a miles de jóvenes de todo el mundo que han sido capaces de descubrir algo (o mejor, Alguien) que realmente les une y les convoca en diferentes partes del mundo periódicamente en la JMJ (Jornada Mundial de la Juventud).
JMJ 2011 EN MADRID, ESPAÑA.-PANORÁMICA DEL AERÓDROMO DE 'CUATRO VIENTOS'. HABÍA MÁS DE UN MILLÓN DE JÓVENES 
      Ese 'lugar' vino (nació para ello) de la mano de una persona que desde su nacimiento en Belén de Judá, anduvo predicando por los polvorientos caminos palestinos, acompañado de doce amigos, la Buena Nueva. Tras ella, el Reino (no de este mundo, pero sí a partir de este mundo), de Paz y Justicia, de Vida y Amor auténtico, real y pleno, que ocupó toda su vida hasta que la entregó, cosido a una Cruz, por todos nosotros. Por vosotros y por mí. Por vuestras familias y por la mía. Por vuestros amigos y por los míos. Por todos sin ninguna distinción.
     
Él es quien puede llenar nuestra vida realmente, en su totalidad, infinitamente más que con el botellón o con la orgía de turno. Solamente hay que dar el paso con decisión, a la brava, como le dijo el Obispo Remigio al Rey bárbaro Clodoveo, cuando se convirtió al cristianismo para ser Rey de Francia: 'Altivo sicambro: adora lo que quemaste y quema lo que adoraste'.                  BAUTISMO DE CLODOVEO, REY DE FRANCIA, POR EL OBISPO REMIGIO.                                                                             Sólo así, dando ese paso decisivo, definitivo y crucial, podrás descubrir la cercanía de Cristo en ti vida y la llenará con abundancia.    Sólo así, desde esta experiencia, podréis decir vosotros lo que dijeron los habitantes de Sicar, ciudad de Samaria, dijeron a la mujer samaritana que les avisó de la presencia de Jesús: 'Ya no creemos por lo que tú nos dijiste, sino porque nosotros mismos hemos oído y visto que éste es, verdaderamente, el salvador del mundo'. (Jn. 4, 42).
JESÚS Y LA SAMARITANA.-DUCCIO DI BUONINSEGNA.-GÓTICO
      Sólo así se os podrá decir, con toda justicia y con todo merecimiento: 'Os felicito a vosotros, jóvenes, porque habéis vencido al maligno'. Y permitidme que os haga este añadido: 'Porque habéis hecho de vuestra vida una opción por quien es la Vida, el Camino y la Verdad'.
CRISTO RESUCITADO
      Que Cristo, Señor de la Vida y de la auténtica Alegría y de la Virgen su Madre, Reina de los Jóvenes, nos bendigan y ayuden.